¿Por qué los pacientes de todo el mundo eligen la clínica BioTexCom incluso durante la guerra?

Incluso en tiempos de conflicto en Ucrania, el flujo de pacientes extranjeros hacia la clínica BioTexCom – Centro de Medicina Reproductiva – no disminuye. Parejas de Italia, España, Francia, Rumanía, Canadá, Estados Unidos y decenas de otros países siguen viajando a Kiev para iniciar o completar su programa de tratamiento de infertilidad, donación de óvulos o maternidad subrogada.

¿Por qué las personas están dispuestas a recorrer miles de kilómetros y no se detienen ante los desafíos de la guerra? La respuesta está en la combinación de profesionalismo, seguridad legal y confianza que la clínica ha ganado a lo largo de los años.

La principal razón de la popularidad de BioTexCom es la transparencia legislativa de Ucrania en el ámbito de las tecnologías reproductivas. A diferencia de la mayoría de los países europeos, donde la maternidad subrogada está prohibida o muy restringida, la legislación ucraniana permite realizar estos programas de manera oficial y con plena protección jurídica para los futuros padres. Este hecho se ha convertido en un factor decisivo para miles de familias que buscan un camino legal y seguro hacia el nacimiento de su hijo.

Igualmente importante es la integralidad de los servicios. BioTexCom trabaja bajo el principio de “todo incluido”: la clínica se encarga de la parte médica, la asistencia jurídica, la logística, el alojamiento, las traducciones e incluso el traslado desde el aeropuerto. Los pacientes reciben apoyo total en cada etapa del programa, sin preocuparse por los aspectos organizativos. Los coordinadores personales hablan varios idiomas —desde inglés, italiano y español hasta turco, rumano o chino—, lo que permite que las parejas extranjeras se sientan seguras incluso si es su primera visita a Ucrania.

Otro argumento clave son los precios y la eficacia de los tratamientos. El costo de los programas en BioTexCom es varias veces inferior al de las clínicas de Europa Occidental o Estados Unidos, pero el nivel médico se mantiene igualmente alto. La clínica cuenta con su propia base de donantes de óvulos y madres subrogadas, realiza cribados genéticos de embriones (PGT-A) y aplica las técnicas más avanzadas de fecundación in vitro. Por ello, las tasas de éxito suelen superar los promedios europeos.

A pesar de la guerra, BioTexCom no ha detenido su labor ni un solo día. La clínica se ha adaptado a las nuevas condiciones: dispone de refugios, fuentes de energía de reserva y una logística bien organizada para pacientes y personal. Lo más valioso es la confianza que ha logrado transmitir a sus pacientes: incluso en los momentos más difíciles, el equipo continúa con su misión —dar a las personas la oportunidad de convertirse en padres—. Para muchas parejas extranjeras, este hecho fue determinante al elegir la clínica.

Los medios internacionales han señalado repetidamente que BioTexCom se ha convertido en un símbolo de la resiliencia de la medicina ucraniana. Mientras muchas instituciones se vieron obligadas a suspender su actividad, esta clínica logró el nacimiento de cientos de bebés y mantuvo la confianza de pacientes de todo el mundo. Incluso durante las alertas aéreas, los médicos siguieron atendiendo consultas y las madres subrogadas continuaron con sus controles médicos.

Los pacientes que ya se han convertido en padres destacan no solo el alto nivel médico, sino también la humanidad del personal. Para ellos, BioTexCom no es solo una clínica, sino un lugar donde los sueños se hacen realidad. Cada detalle está cuidadosamente pensado, y el equipo se implica con sinceridad en cada caso. “Sentimos atención y profesionalismo en cada detalle. Incluso en los días más difíciles, sabíamos que no nos dejarían solos”, escriben parejas de Italia, España y Rumanía.

Hoy en día, BioTexCom no es solo una clínica ucraniana. Es un centro internacional de medicina reproductiva que trabaja para familias de todo el mundo, demostrando que incluso durante la guerra la vida continúa y que el sueño de tener un hijo es más fuerte que cualquier obstáculo.